Gente Maja

domingo, 5 de septiembre de 2010

Strike a pose. Vogue, vogue, vogue.



Desde los inicios del Séptimo Arte, las estrellas de cine han constituido una de las mayores fuentes de influencia en los cánones de estética y moda. Con ellas aprendimos a vestirnos, a peinarnos, a sonreír, a posar, a fumar... y a enamorarnos de cualquiera de los muchos tipos de belleza exportados durante décadas desde la gran pantalla.

En la imagen, Audrey Hepburn en la película de Billy Wilder Sabrina, ¿no os recuerda este maravilloso vestido a otro visto no hace mucho?






Exacto, el vestido de Balmain que Penélope Cruz (la nueva musa de la elegancia y el glamour en Hollywood) lució en la gala de los Oscars hace dos años. Personalmente prefiero este vestido al de Audrey, porque, permítanme la licencia, la única palabra para describirlo es orgásmico.


Gloria Swanson, con un maravilloso vestido de escote atelier. Ella fue una de las actrices más estilosas, sobre todo, en los años 20.


"Para la década de los 30, ya Hollywood estaba tan profundamente envuelto en la promoción de modas, complementos y cosméticos, que se había convertido en la mayor influencia de estética femenina del mundo. Las fans copiaban los estilos de vestido y maquillaje de sus estrellas favoritas, bien de las fotografías de las revistas, o bien directamente de las películas." (Richard Maltby e Ian Craven, Hollywood Cinema).


Audrey Hepburn recogiendo su Oscar por Vacaciones en Roma. Este Givenchy, es considerado por muchos el mejor vestido que ha pisado una alfombra roja.


El texto anterior define a la perfección el poder y la influencia que siempre han caracterizado a la meca del cine a la hora de imponer sus cánones de belleza y moda a los espectadores de todo el mundo.
La lista de ejemplos es numerosísima y conocidísima: el peinado de Verónica Lake en los años 40; la moda Bonnie tras el estreno en 1967 de la película Bonnie&Clyde; el corte de pelo a lo garçon de Mia Farrow en La semilla del diablo (1968); y las camisas amplias y chalecos de Diane Keaton en Annie Hall (1976). Los varones también han dejado huella: el estilo de "chico malo" de James Dean en Rebelde sin causa; o Clark Gable, que hizo bajar la venta de camisetas en Estados Unidos cuando mostró su pecho desnudo en Sucedió una noche, y Marlon Brando, que provocó el efecto contrario cuando embutió en una de ellas sus perfectos músculos en Un tranvía llamado deseo.

Esta influencia no deja de ser curiosa si tenemos en cuenta que surgió, en cierta manera, contra corriente. Porque en su inicio, las actrices y actores de cine no tenían "nombre": cuando los primeros productores comenzaron a crear cintas en serie destinadas al consumo masivo, no consideraron necesario incluir en ellas los nombres de los protagonistas. A fin de cuentas, la de actor era una profesión desprestigiada, y los intérpretes de cine, perfectos desconocidos a sueldo de cada estudio a los que, llegado su caso, se podía despedir o sustituir sin problemas.
O eso es lo que creían.


(Nicole Kidman, de Gucci, recogiendo su Oscar por su interpretación en Las horas)


Los magnates no habían previsto que el público comenzara a fijarse en determinados actores y actrices y a escribirles cartas de admiración, que llegaban a los estudios dirigidas a "el mayordomo con bigote o la chica rubia de pelo rizado" según recordaba William Goldman. "En 1910, la actriz más popular de América era conocida como La chica de la Biograph... la Biograph era la compañía con la que la chica tenía contrato". Pero ese mismo año, Carl Laemmle, dueño de IMP (más tarde Universal) se llevó a esa chica a su estudio con un contrato muy jugoso y se encargó de publicitar su nombre por todo el país: Florence Lawrence, acababa de nacer la primera estrella del cine.



Sin embargo, la estrategia de Laemmle no habría surtido efecto sin la ayuda de la invención del primer plano , que agigantaba el rostro de los actores hasta convertirlos en una presencia que apabullaba el patio de butacas.
Según explica Roman Gubern: "el primer plano, al magnificar la presencia de los intérpretes, permitió al público reconocer y familiarizarse con los actores y actrices más fotogénicos y atractivos, y no tardó en aparecer un fenómeno de identificación emocional y su consiguiente culto colectivo."


Primer plano de Marlon Brando (sin palabras...)


Al hablar del atractivo de las estrellas, se tiende a uniformizar como si todos ellos respondieran al mismo arquetipo físico. Algo de eso hubo, pues en la época clásica, los estudios procuraban tener en nómina a todos los posibles registros de un reparto y siempre intentando "clonar" la imagen de la estrella más taquillera en cada campo. Cuando los intérpretes se independizaron y pasaron a estar disponibles para cualquier productora, la personalidad de cada uno comenzó a valorarse más que el estereotipo estético al que pertenecían.


Claudette Colbert en Cleopatra (1934), espectacular.


Así y todo, la variedad estuvo presente desde el principio, y sin duda alguna, Mae West tiene un lugar destacado, pues irrumpiría personificando como nadie el prototipo de provocadora, con unos guiones y una actitud pública cuidadosamente seleccionados para escandalizar.


Mae west, con un vestido con transparencias.


Todos los arquetipos y categorías (o estereotipos) han ido conociendo, relevo tras relevo, nuevas caras y formas de actuar, sin que sus principio básicos se hayan alterado excesivamente.


Montgomery Clift, ¿se puede ser más guapo?


PROTOTIPOS DE BELLEZA MADE IN HOLLYWOOD.

1º La vecina de al lado.

Arquetipo iniciado por Mary Pickford, la llamada novia de américa (la primera, la original, no Julia Roberts), en su día, la estrella más popular de Hollywood. La belleza de sus integrantes se basa en una sencillez que propicia su proximidad con el espectador.
Algunos ejemplos son:

Mary Pickford.


Audrey Hepburn.



Jean Arthur


Ingrid Bergman.


Carole Lombard.


Jennifer Aniston.



En la sección masculina, Montgomery Clift.




Aunque si vemos las siguientes fotos, bien podríamos pensar que pertenece al prototipo número dos.





2º El macho.

El atractivo masculino en su vertiente más animal ha sido siempre su carta de presentación desde que Clark Gable empezó a imponerlo. La testosterona exhibida a través del vigor físico y el sudor era característica común, y los papeles de deportistas o aventureros les venían como anillo al dedo.

Clark Gable.


Steve McQueen.


John Wayne.


William Holden.


Burt Lancaster.



3º El galán clásico.

Un tipo que no ha sobrevivido hasta nuestros días, salvo quizá, como caricatura. Y es que el bigotito, el pelo engominado y el traje cruzado eran emblemas de una época anclada en el pasado casi desde el principio. Sus representantes eran caballeros de la alta sociedad y de buenas formas, y allí quedaban presos en un encasillamiento de difícil evolución.

Errol Flyn.


John Gilbert.


Tyrone Power.



Gary Cooper.



4º El galán tradicional.

Presente en todas las épocas del cine, es el arquetipo más firme y al mismo tiempo, más cambiante. El monopolio anglosajón ha ido perdiendo aquí terreno.

Rodolfo Valentino.


Cary Grant.


Rock Hudson.


Paul Newman.



Robert Taylor.



5º La bomba sexual. La mujer ardiente.

Erotismo puro y duro, no sólo reconocido sino esplotado por la industria del cine, que intentó potenciar el magnetismo sexual de estas actrices hasta los límites de lo permisible. Solían destacar por algún rasgo físico, como las curvas de Marilyn o la cabellera roja de Rita Hayworth, y frecuentemente interpretaban a mujeres provocadoras , al borde de la moralidad, llegando a eclipsar a sus coprotagonistas masculinos.
La palabra ardiente no tiene por qué significar sexo: es su temperamento fogoso lo que las caracteriza.

Rita Hayworth.



Ava Gardner.


Marilyn Monroe.


Sofía Loren.


Kim Basinger.


Penélope Cruz.



6º El "feo" interesante.

Este prototipo se da cuando comenzaron a ocupar primeros papeles actores cuyo físico no se corresponde con el atractivo al uso. Conquistaron la pantalla gracias a unos rasgos muy particulares que les conferían una personalidad única.


Orson Welles.


James Stewart.


Robert de Niro.


Al Pacino.


Dustin Hoffman.


Jack Nicholson.



7º El rebelde.

Su clave es mantener una imagen de inconformista, tanto dentro como fuera de la pantalla. Camisetas sucias, rostros sin afeitar y una permanente actitud antisistema, fueron el arma con los que James Dean o Marlon Brando deslumbraron al público.







8º La mujer de hielo.

La mujer aparentemente fría, que esconde una sensualidad desaforada tras sus facciones de porcelana; cuanto más enigmática, más fascinaba al público.

Greta Garbo.


Grace Kelly.


Catherine Deneuve.


9º La mujer fatal.

La perdición de los hombres tiene nombre de mujer, pues para ellas los varones no eran más que simples muñecos con los que jugar antes de arrastrarles al suicidio, la cárcel o la ruina... en definitiva, papeles femeninos que de ningún modo puede acabar con final feliz.

Marlene Dietrich.


Lana Turner.




10º El canalla.

Con ellos no se está seguro. Eso es lo que les hace tan interesantes. Chulería, sonrisa de medio lado y todos los indicios de un pasado poco recomendable, a años luz de lo políticamente correcto. También podemos llamarlos antihéroes (sobre todo en el caso de Mitchum).

Robert Mitchum.


Kirk Douglas.



Pequeño apunte sobre el glamour.
Al igual que la belleza, el galmour no es uniforme, hay distintas clases. Y el cine nos las muestra a la perfección: desde el físico y el estilismo perfectamente estudiado, donde encontramos a Marlene Dietrich, que además, sabía esconder muy bien sus defectos y realzar aún mejor sus virtudes (aquí también podemos incluir a Grace Kelly); pasamos a Greta Garbo, de aspecto lánguido, cansado y andares desgarbados; y Audrey hepburn, que encarna la sencillez, la naturalidad.

Hace poco, determinadas personalidades del mundo de la moda (diseñadores, cool-hanters, estilistas y periodistas) hicieron un ranking sobre la influencia de las famosas en el mundo de la moda: en los años 20, Gloria Swanson; en los 30 y los 40, Marlene Dietrich; en los 50, Audrey, en los 60 Grace Kelly; en los 70 Jaqueline Kennedy (Brigitte Bardot estaría presente en los dos décadas); en los 80 Madonna; y los 90, es la década de las tops (Naomi Campbell, Claudia Shiffer Linda Evangelista, Eva Herzigova, etc.)


Audrey hepburn dando un paseo en bici con su mascota.


Grace Kelly el día de su boda, momento en el que pasó a convertirse en princesa.


Marlene Dietrich, cuando su hija la hizo abuela, la prensa de la época le puso el apelativo de la abuela más glamourosa del mundo. El español Cristóbal Balenciaga dijo que estaba orgullso de ser uno de los modistos favoritos de la actriz.


Greta Garbo. ¿Qué puedo decir de ella que no haya dicho ya?

Fotos curiosas.


Audrey Hepburn y Grace Kelly en el backstage de la gala de los Oscars, ¿es posible que haya más glamour en un espacio tan pequeño?


Marilyn Monroe caracterizada de Marlene Dietrich en la película que la catapultó a la fama El Ángel Azul (1930). Aunque en realidad, el ídolo de la Monroe siempre fue Jean Harlow.



Jean Harlow.


En la foto de abajo, y para despedirme, os dejo a Bette Davis, Marlon Brando y Grace Kelly en los Oscars de 1954.



Hasta la próxima entrada corazones.

16 comentarios:

Anónimo dijo...

No sé vosotros pero yo no tengo ninguna vecina como Carole. Ójala tuviera uno como Newman jajajajajajjaja.

Muy, muy interesante, gracias!

¿Alguien sabe qué se proponía exactamente Bette con esa mezcla "madrastra Blancanieves"- "guerra de las galaxias"? ¡No me lo digais!

Un saludo,
DashwoodGirl

David dijo...

Interesante post, White Gold ("el que no es Bruja Truca"). De todas formas, yo no enmarcaría a Ingrid Bergman o Audrey Hepburn como "vecinas de al lado". Si yo tuviera una vecina como Ingrid... en fin, dejémoslo. Y Audrey puede ser natural, pero es como la elegancia y la clase personificada, ¿no? La vecina de la mansión de al lado, vamos.
De todas formas, la foto de Marilyn no la conocía! Y la de Audrey y Grace es estupenda (como el comentario).
Un saludo.

David dijo...

Acabo de leer el primer comentario y no, Carole tampoco entraría como "vecina". Y menos la Carole de esa foto.
Pero un post estupendo y muy agradable de leer y ver.

Bruja Truca dijo...

Enhorabuena White. Un post currado, interesante, entretenido e informativo. Nos quedamos (al menos yo) con ganas de más.

Yo si estoy de acuerdo con las actrices que has puesto como "vecinas de al lado" porque creo que no te refieres al físico, sino a una aptitud, y la aptitus natural de Audrey o Ingrid eran muy familiares en pantalla.
Por otra parte, no estoy de acuerdo en que Penelope Cruz sea una bomba sexual. O sera que las comparaciones (por ejemplo con Rita) siempre son odiosas. Y por otra parte, el vestido de Penélope de Balmain me recuerda a un vestido de novia.

Si tengo que escoger un estilo me quedo con el de Diane Keaton en Annie Hall y el de Faye Dunaway en Bonnie and Clyde. Me encantan los dos, no puedo decidirme.

Me quedo con los ojos de Carole Lombard, las piernas de la Dietrich y la sonrisa de Audrey.
Y la pregunta de Dashwood Girl sobre el atuendo de Bette Davis es simplemente genial. XD

Un abrazo!

Saraiba dijo...

Que post tan interesante. Mis grandes musas!! Adoro su forma de vestir, de caminar...con cada película me enamoran más. Que gran cine se hacía antes. Encasillemos donde las encasillemos, todas eran unas auténticas actrices.

un besote

atikus dijo...

Fantástico post!

Siempre alucino con el vestuario y las poses de las actrices y actores, sin duda los mas grandes tienen ese toque que les hace geniales.

La forma de contornearse de la Monroe, o el estilo de Audrey con un vestido elegante, la mirada penetrante de Ava...o en los hombres la mirada perdida de J.Dean o la forma de caminar y hablar de Wayne...el porte de C.Grant ..en fin...


Me encanta descubrir pequeños detalles cada día, por ejemplo, mirando en tu post estaba recordando el vestido que pones de Gloria Swanson, si mal no recuerdo es el que lleva en la peli de 1931 "Tonight or never", es que lo recuerdo porque la vi hace poco y recorde ese escote que comentas y los tirantes transparentes que ayudan a mantenerlo recto..que cosas...



Bueno intentaré no liarme...


De los guapos por excelencia que pones, se podrían hacer mil clasificaciones, en general estoy de acuerdo...quizas añadiría alguno mas...por ejemplo pondré algún ejemplo en cada sexo.

En las mujeres pondría a la "Pequeñita pero matona", en este caso Veronica Lake, y en caso de modernidad scarlett johanson,

En el bando masculino al "Hombre Papa"...esto es al chico que recuerda a la figura paterna,...pondría a Gregory Peck.

Bueno y sin mas tonterías me despido por hoy :-)


saludos

Marcos Callau dijo...

¡Guau!, ¡vaya repaso!. La verdad es que ha sido apabullante, no sé qué decir. Me quedo con el vestido de Audrey Hepburn y el estilo y la clase para llevarlo. Sí, puede que el de la Cruz sea más orgásmico pero para mí, no se trata de eso. Quizá es porque para mí Audrey es irresistible. Como bomba sexual me quedo con Ava Gardner y después con Gilda. Como mujer fatal entre las publicadas m quedo con Lana Turner pero añadiría a Gloria Grahame. También he echado de menos a Laura... esto, Gene Tierney pero la selección es muy buena. Sin duda la que más clase tiene de todas es Audrey. Me ha hecho mucha gracia también lo de los feos que caen bien y resultan interesantes. Está claro que Orson Welles es el más representativo. Muy buen post.

ANRO dijo...

Vaya torrente de glamour!!!...sería difícil hacer una elección, pero me llama muchísimo la foto del Life en la que aparecen la Kelly y la Hepburn.
Un abrazote.

White Gold dijo...

Hola a todos y muchas gracias por vuestros comentarios:

DashwoodGirl, me encanta tu descripción sobre el vestuario de Bette Davis!! jajaja!!!! Por cierto, también me encantaría tener un vecino como Paul Newman. Gracias.

David, me encanta lo de "el que no es Bruja Truca" jaja!! creo que lo usaré muy a menudo. y sí, Audrey es la vecina de la mansión de al lado: sencilla, elegante... da igual que lleve un vestido de alta costura o unos pantalones de algodón para dar un paseo en bici. Siempre perfecta. La foto de Audrey y grace kelly no sabía donde ubicarla, pero tenía que ponerla. Gracias.

Como los dos habéis hecho referencia a la foto de Carole, os cintesto a los dos: la verdad es que la foto de Carole no da para nada el perfil de "vecina de al lado", cuando pensé en ella, en mente tenía la carole de "Ser o no ser" o de otras tantas, pero cuando vi esa foto, en la que está tan sexy y arrebatadora, que tuve que ponerla (aunque no ilustre a lo que me refería);)

Bruja, no podría haber descrito mejor a lo que me refería con vecinas de al lado. :)
Yo también prefiero a Hayworth, pero a Penélope la he puesto por las curvas, simepre usa escotes... no sé, muy Sofía Loren. Mis vestidos favoritos son los que lucía la Garbo en sus películas y Dietrich (sobre todo con Sternberg). Besos!!!

Noelia, suscribo totalmente lo que has dicho. :)

Atikus, si, ese vestido es de esa película!!! Y la verdad que los nombres que mencionas al final, los tendré en cuenta por si hago otra lista. Gracias!! :)

Marcos, yo prefiero el vestido de Penélope, pero como forma de llevarlo, Audrey. Es más, creo que esa noche Penélope Cruz iba muy Audrey Hepburn, no solo por el vestido, también por el peinado, la forma de andar, posar, mirar a cámara... y como siempre, me quedo con el original. Ya sé que se me han quedado muchos nombres fuera, pero estaba tan "aturullado" buscando nombres y fotos, que prefería parar. Lo de los "feos" es solo un nombre, pero se me ocurría como titular ese estereotipo. Gracias.

Anro, yo también me quedo con esa foto, cuando la vi, tuve que publicarla. Gracias.

White Gold dijo...

Ah, Atikus he estado mirando por ahí, y he leído que el vestuario de Gloria Swanson para esa peli fue diseñado por Coco Chanel.

una chica de ojos marrones dijo...

me ha encantado el post!
un saludo

White Gold dijo...

Hola chica de ojos marrones, me encanta que te encante!!!

Bargalloneta dijo...

Interesantísimo post!!!!
me he quedado con la boca abierta con la foto del bacjstage entre Kelly y Audrey, casi me caigo de espaldas, espectacular!!!!!

White Gold dijo...

Hola Bargalloneta!!! muchas gracias, y efectivamente, espectacular es la palabra que define a la perfección esa fotografía. ;)

Teléfila dijo...

Me ha encantado el post... Y por qué no decirlo, ver a mi querido Steve McQueen todo descamisado :p Aunque a él se le podría meter en más de una categoría.

White Gold dijo...

Gracias Teléfila!!! si la verdad es que podría haberlo metido en otra categoría (como a otros actores y actrices que encajarían en otros estereotipos), pero creo que esa es la que más lo caracteriza.
A mi también me encanta esa foto ;)
Gracias!!!