Gente Maja

miércoles, 29 de febrero de 2012

¿Quién teme a Virginia Woolf? (Who's afraid of Virginia Woolf?, 1966)



Había una vez un director desconocido de 34 años, Mike Nichols, y dos actores que se creían inapropiados para desempeñar los roles principales (Elizabeth Taylor y Richard Burton), una película muy atrevida y emocionalmente violenta que podría no haber conectado con los espectadores, y que sin embargo fue la triunfadora del año en taquilla y en la gala de los Premios de la Academia.




George (Richard Burton) y Martha (Elizabeth Taylor) son una pareja autodestructiva que se odia a muerte. Ambos sienten una predilección especial por las bebidas alcohólicas y conocen a la prefección los puntos flacos de su oponente. Él es profesor de historia y ella (una mujer frustrada, vulnerable y con muy mala uva) la hija del director del instituto donde él da sus clases.
Una noche, preparan una cena para dar la bienvenida a un nuevo profesor y su esposa, y como es natural, tanto George como Martha comenzarán a dar rienda suelta a su juego de insultos y degradaciones en el que acaban metiendo a la joven pareja. Pero lo peor está por llegar, y la verdad no tardará en salir a la luz...


La obra se estrenó en Brodway en octubre del 62 dirigida por Alan Schneider y escrita por Edward Albee. Una de las críticas que recibió fue: "Esta obra solo deberían verla mujeres con la mente sucia.", lo que contribuyó al inmediato éxito. Ganó 5 Tonys: producción, dirección, obra, actor y actriz.

Ante tal panorama, Jack Warner pensó inmediatamente en hacerse con los derechos de la obra, pero muchas voces le dijeron que no lo hiciera, pues era demasiado ácida para Hollywood, y si quería estrenarla allí debería deshacerse de todas las blasfemias y los diálogos abiertamente sexuales, y por tanto la película perdería "la gracia." Aún así, en el año 63, la Warner Brothers tenía los derechos de la obra para realizar la versión cinematográfica. Cuando llegó la hora de adaptar el guión la elección del estudio fue Ernest Lehman.

En un principio se pensó en Bette Davis y James Mason para los papeles principales. Al autor de la obra teatral le hubiese encantado que la protagonista hubiese sido "la reina de Hollywood" porque como él mismo dijo: "Me hubiese encantado ver a Bette Davis hacer de Bette Davis", además en la película de King Vidor Más allá del bosque, Bette dice la famosa frase de Martha "Menuda pocilga."
Seguidamente para el papel masculino se pensó en Henry Fonda, pero su agente rechazó el ofrecimiento sin pensarlo dos veces.

Ante tal lío, Ernest Lehman tommó las riendas y dijo que sería él y nadie más el encargado de elegir al reparto, al director y al equipo técnico.
Y él quería a Elizabeth Taylor, por lo que envío una copia del guión a su casa. la respuesta de la actriz fue: "No sé si podré hacerlo." Fue su marido, Richard Burton, quien le animó a aceptar el rol de Martha: "Es una gran obra. Debes aceptarlo." Por tanto los protagonistas ya estaban ,además las razones comerciales jugaron mucho a su favor: Burton y Taylor se peleaban y reconciliaban continuamente, se gritaban e insultaban, pero al instante se comían a besos... había pasión, que, por una parte era lo que requería la cinta, y por otra eran carnaza para la prensa del corazón.


¿Y el director? Pues señor y señora Burton desecharon a John Frankenheimer (que en un principio había sido el elegido) e impusieron a Mike Nichols, que conocieron en Brodway mientras él hacía Nichols y May y Burton actuaba en Camelot, el problema era que nunca había dirigido una película.

Con todos estos jaleos de trastienda, llegó el año 65 y por fin comenzó el rodaje.
Pero aún había una cuestión más ¿color o blanco y negro? El autor de la obra preguntó que por qué estaban rodando en b/n y desde producción se le respondió que "las películas serias se ruedan en blanco y negro". Además, el asunto no se prestaba al color, el b/n hacía parecer aún más temibles a sus personajes.


Todos sabían que Richard Burton tenía una personalidad muy, muy fuerte y temían que la sacara más allá del personaje, pero en última instancia él era el maestro de ceremonias del film; y por lo que respecta a Elizabeth Taylor, muchos la veían incapaz de sacar adelante a un personaje tan visceral y violento como Martha, pues aunque ya había demostrado que era algo más que una cara bonita en La gata sobre el tejado de zinc y Una mujer marcada , todavía era vista como una estrella salida de la política de estudios. Y calló todas las bocas.


La película estuvo nominada a 13 Oscars, resultando ganadora en 5 categorías: mejor actriz principal (Elizabeth Taylor), mejor actriz de reparto (Sandy Dennis), mejor fotografía en blanco y negro, mejor dirección de arte en blanco y negro y mejor diseño de vestuario para una película en blanco y negro. Las otras ocho categorías son: mejor película, mejor actor principal, mejor director, mejor actor de reparto, guión adaptado, montaje, sonido y banda sonora original.



La película ¿Quién teme a Virginia Woolf? clavó una estaca en el corazón de la censura norteamericana, y podemos añadir que puso la primera piedra en el camino hacia la liberalización de los códigos de producción de los estudios gracias a unos diálogos plagados de insultos, blasfemias y referencias sexuales y unas interpretaciones que han hecho historia.



P.D: No quisiera terminar mi entrada sin antes decir: MERYL STREEP... I LOVE YOU!!!

Hasta la próxima entrada corazones.

13 comentarios:

Bruja Truca dijo...

Bueno, que voy a decir yo... es una de mis películas favoritas. Sin duda es la mejor interpretación de Elizabeth Taylor, que me dejó sin habla. Me encanta cuando una actriz que se considera sólo una cara bonita, tapa todas las bocas, como bien dices. La interpretación de Taylor fue desgarradora, sólo comparable a Davis en "Que fue de Baby Jane" y K. Hepburn en "Larga jornada hacia la noche". Que trio de ases. Me emociono sólo de hablar de ellas xDDD

Hace tiempo que tengo ganas de volver a verla, y que mejor ocasión que después de leer esta estupenda entrada. Por cierto, estoy pensando en hacer algo en el blog, que te comentaré en privado por facebook. ;)
Saludos.

jesus (of suburbia) dijo...

Una de esas historia de una noche que tanto gusta, al estilo La gata sobre el tejado de zinq, que me gusta un poco más que Quién teme a Virgina Woolf, que por momentos me parece exagerada. Aunque la química Burton-Taylor es fascinante.

Saraiba dijo...

Esta película es una maravilla. Este estilo de cine me gusta mucho. Para mi una de las mejores cintas de Taylor. Buena recomendación.

Manderly dijo...

Elizabeth Taylor ha demostrado con creces que no solo es una cara bonita sino que además es una de las mejors actrices de su generación.
Burton, siempre a demostrado su buen hacer en cada uno de sus personajes y aquí se ve una vez más.
Argumento muy atrevido para la época que hace que nos olvidemos de la belleza externa de sus protagonistas y entremos en lo más profundo de sus emociones.
Saludos.

LA DESGRACIÁ dijo...

Fantástica película y fantástico post.

Bss

Amanda dijo...

Es una de mis películas favoritas, y al leer este post me han entrado ganas de verla de nuevo. Sin embargo los Oscar que una película pueda ganar no me dicen mucho. Richard Burton es, en ese sentido, uno de los actores malditos de Hollywood (siete nominaciones y ningún premio, sin duda una injusticia). La noche de la iguana, otro de los mejores largometrajes de la historia, tan solo se llevó el Oscar al mejor vestuario y, en mi opinión, Richard Burton hace su mejor interpretación, por la que ni siquiera lo nominaron.
Saludos.

Cristina dijo...

la química entre Burton y Taylor es el motor de la película. Sus interpretaciones son desgarradoras. Es la pasión del amor versus la pasión del desamor en siempre en superlativo. Liz no es actriz e mi gusto aunque reconozco su buenhacer.
Excelente entrada.
Un saludo

Verónica dijo...

Adoro el cine clasico, asi que puedo decir yo...

besos

Bargalloneta dijo...

Taylor era un pedazo de actriz y aunque y alo habia demostrado quien aun no lo tenia claro aqui quedo la setencia a su favor!!!!
TEngo que recuperarla aunque ya se que lo voy a volver a pasar mal!!!
y yo tampoco lo puedo evitar
Meryl I love you toooooo

TRoyaNa dijo...

Confieso que si la he visto,no la recuerdo,así que me pongo a buscarla porque la entrada me ha convencido.
Así a bote pronto,no sé porqué el argumento me ha llevado a "Un dios salvaje" de Polansky,en el sentido de que reciben a unos invitados y en la velada,salen todos los "demonios" que suelen ser encerrados bajo siete llaves conforme dictan los códigos de la educación y las buenas costumbres.

and.........I love Meryl too!!!

Un abrazo!

Melvin dijo...

Bueno, me apunto este clasicón inevitable para un próximo visionado... Las interpretaciones arriesgadas suelen ser las más conmovedoras... Un besote, me gustó pasar por aquí.

Anónimo dijo...

¡No olvidemos a los secundarios de lujo G Segal y S. Dennis!

krispo dijo...

me ha encantado tu blog, seguiré leyéndote encantada, te dejo un beso*